Santuario de la
Inmaculada
Virgen de Juquila
Santuario
Nuestra Señora la Inmaculada Virgen de Juquila tiene por morada un modesto Santuario ubicado en la ciudad de Santa Catarina Juquila, Oaxaca, México. Según el Código de Derecho Canónico “con el nombre de santuario se designa una iglesia u otro lugar sagrado al que, por un motivo peculiar de piedad, acuden en peregrinación numerosos fieles, con aprobación del Ordinario del lugar” (CIC, 1230).
El templo lo empezaron a construir en 1785 y lo terminaron en 1880.
El Santuario recibe cada año a miles de peregrinos de diversos puntos de la entidad y de estados vecinos que vienen a dar muestras de fe, esperanza y caridad, suscitadas por la intercesión amorosa de la Bienaventurada Virgen María.
El Santuario de la Inmaculada Virgen de Juquila es considerado, por la Secretaría de Turismo (SECTUR), como el tercer Santuario mariano más visitado a nivel nacional.
Con motivo de la Coronación Pontificia de la Inmaculada Virgen de Juquila, llevada a cabo el 8 de octubre de 2014, concedida por el Papa Francisco, el recinto fue declarado Santuario Diocesano de la Reconciliación y la Paz por Mons. José Luis Chávez Botello, el entonces Arzobispo de Antequera Oaxaca.




La imagen
La imagen es pequeña, de 30 cm de altura, tallada en madera. Está vestida con la postura y signos de la Inmaculada Concepción, parada sobre la luna. Aunque no necesita ser vestida, por poseer la talla porte original, la devoción los fieles siempre le ha puesto vestido y manto.
Con motivo de la Coronación Pontificia, la imagen resalta y luce ahora los signos propios de la Inmaculada Concepción. Entre ellos los colores azul y blanco. El mundo a sus pies, que parece ser dominado por la serpiente, signo del mal, es un signo frecuente de la Inmaculada. María parada sobre estos elementos representa la esperanza de que el mal puede y debe ser dominado, pues por ella nos viene el Salvador del mundo. Los ángeles ya los tenía la imagen en su presentación anterior, aunque pequeños, sólo que por el vestido no lucían. Ahora en grande están: Miguel, Gabriel y Rafael.